Penélope (V.O.S Catalá)

Carmen tiene 97 años y, como si de la Penélope de la Odisea se tratara, cose, habla con sus vecinas y vive su día a día en Santa María de Oló mientras espera el regreso de su marido. El Ulises de esta historia sería Ramón, un hombre que, tras treinta años fuera de su hogar, regresa de su epopeya en un último viaje. Su vuelta significa no sólo el reencuentro con su patria y su amada, también con unas costumbres y el estilo de vida de una generación que prácticamente morirá cuando lo hagan ellos.

Para su primer largometraje de ficción, Eva Vila lleva al espectador hasta el pequeño municipio de Santa María de Oló, donde entre sus espectaculares paisajes montañosos sitúa una visión muy personal, íntima y crepuscular, de La Odisea de Homero. En lugar de centrarse en los viajes y aventuras de Ulises, Penélope apunta con su objetivo hacia la larga espera de su amada para hablar de raíces y sentimiento de pertenencia a una comunidad. Como alter egos de los personajes de la epopeya clásica, el film es protagonizado por un matrimonio de ancianos que, tras 30 años separados, se reencuentran. Con este regreso llegarán recuerdos del pasado y promesas de futuro que no pueden escapar de la melancolía del tiempo que nunca se podrá recuperar y las oportunidades que se perdieron. En esta película de bella factura, donde realidad y leyenda se confunden entre imágenes de gran lirismo, se hace un canto a la ausencia, pero también a la audacia de convertir la espera en un modo de sobrevivir a ella. Los actores amateur Carmen Tarte y Ramón Clotet interpretan a estos ancianos que vuelven a verse en un lugar que ya poco tiene que ofrecerles.